Parecía que el día nunca llegaría. Mientras nos preparábamos para abordar el avión bajo la voz “tranquilizadora” de “Última llamada para el vuelo VY2115 a Málaga ...”, sabíamos que este era solo el comienzo.
Un par de meses atrás Helena, nuestra Head de Marketing y Comunicación en España y Fran nuestro Regional Director interino para el área de Barcelona tuvieron una brillante idea. Como parte de la expansión de Codurance en España, estábamos poniendo fin a la época de eventos solo virtuales a los que nos ha obligado la pandemia COVID-19 y, por primera vez en año y medio, nos aventuramos a realizar un evento presencial.
La ubicación ideal para este evento era Málaga, una ciudad que ha sido noticia recientemente con titulares como Google decide abrir su centro de cyberseguridad en Málaga y otras noticias con las que se está empezando a denominar a la ciudad como "El Silicon Valley del Sur". La propia ciudad se está convirtiendo en un centro tecnológico, gracias a su calidad de vida y en gran parte al Parque Tecnológico de Andalucía (PTA para acortar) catalizador de la afluencia de empresas locales y otras empresas mundialmente conocidas como Oracle y Ericsson entre otras.
Con una configuración tan excelente, pusimos toda nuestra energía y experiencia en la tarea y nos asociamos con el PTA y TheWorkshop para crear uno de esos eventos a los que nos encantaría asistir incluso sin ser los organizadores. Mención especial a Álvaro y Clara por toda la ayuda que nos han brindado para hacer posible que esto suceda, sin su apoyo y pasión este evento no hubiera sido posible.
El plan era el siguiente: una charla, un panel de discusión abierto y un momento de networking.
Tendríamos a Sandro Mancuso, reconocido autor, ponente y cofundador de Codurance, impartiendo una charla sobre uno de esos temas más relevantes en el contexto actual: la modernización del software.
La charla de Sandro se centraría en brindar información sobre cómo hacer de la modernización un elemento estratégico para la organización y asegurar su éxito. Como en todas sus charlas, el contenido abarcaría temas interesantes para todos los roles implicados: desarrolladores, product managers y CXO entre otros.
Fue una charla llena de anécdotas, grandes ideas y consejos fruto de haber librado bastantes batallas en proyectos de este tipo. Si te lo perdiste, estás de suerte, aquí tienes una versión diferente de su talk Software modernisation; a strategic approach en nuestro canal de Youtube.
Luego, después de un breve descanso, él y otros participarían en un panel abierto a los participantes donde podrían hacer y responder preguntas sobre estos y otros temas. En particular, habíamos planeado tener con nosotros, además de Sandro, Mashooq Badar, como co-founder de Codurance, Jesús González Martí, business angel y mentor, y Jose Lopez, VP of Engineering en TheWorkshop.
Parafraseando al gran filósofo Mike Tyson, “Todos tienen un plan hasta que les dan un puñetazo en la cara”, y este evento no fue diferente. Debido a algunos problemas personales de última hora, dos de nuestros panelistas, Mash y Jesús, tuvieron no pudieron asistir. Sin embargo, adaptarnos al cambio es una de nuestras habilidades centrales, tanto en la ingeniería de software como en la forma en que operamos en todas las áreas de nuestra organización, por lo que en menos de un par de minutos, logramos elaborar un plan de respaldo que estuvo a la altura del nivel.
Los lugares serían cubiertos por mí mismo y por Tatiana Morillas, directora de desarrollo de software en TheWorkshop.
A pesar de no estar demasiado preparados fue una experiencia muy agradable y estimulante. La audiencia estuvo muy comprometida e hizo todo tipo de preguntas, desde cuestiones de enfoque más táctico hasta dudas mucho más estratégicas.
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La charla de Sandro abordó muchos aspectos diferentes de la modernización del software que son muy relevantes y creo que sirvió para tener un punto de partida con todas la información general y relevante para la posterior conversación. Estos son algunos de los principales temas tratados y sus conclusiones.
¿Cómo mostrar el valor de negocio de la adopción de nuevas tecnologías como parte del proceso de modernización?
Con este tema tengo que decir que estás de suerte porque tenemos un artículo en nuestro blog que precisamente habla de cómo construir un business case para impulsar tu iniciativa de software modernisation e incluye materiales descargables para ayudarte a construirlo.
En este caso, hablamos de cómo la adopción de nuevas tecnologías tiene dos ventajas muy claras.
Primero, la atracción y retención de talento. A la gente no le gusta trabajar con tecnologías anticuadas, especialmente si no hay un plan para modernizarlas. La adopción de nuevas tecnologías hace posible atraer y retener el talento.
Pero no es la única razón; otros aspectos como los beneficios en el ahorro de costes y la escalabilidad que proporciona la adopción de arquitecturas y componentes cloud native, también ocupan un lugar destacado en la agenda de muchas empresas. ¿Quieres estar preparado para el Black Friday y no sobredimensionar tus sistemas? Aquí es donde la nueva tecnología y un enfoque diferente pueden ayudarte y es exactamente de la forma que hemos ayudado a Cazoo a manejar sus retos de crecimiento.
¿Por dónde empiezo?
Este fue otro tema muy popular. Hablamos sobre áreas de influencia y cómo la alineación, la empatía y la creación de quick wins pueden llevar tu proyecto mucho más lejos. En particular, discutimos lo que se puede hacer para comenzar a influir en otros dentro de la organización y de cómo dividir el valor para que se pueda obtener esos quick wins. En su charla Sandro dedica toda una sección a algunas de las estrategias que se pueden utilizar desde diferentes perspectivas, proceso de equipo, producto, etc.
¿Cuáles son las principales trampas que se deben evitar?
Hablamos sobre el papel de la transformación en iniciativas como esta y cómo saber dónde es más probable que falles te ayudaría a mitigar los riesgos. En particular, hablamos sobre el artículo de John P. Kotter sobre por qué fracasan los esfuerzos de transformación, algo antiguo pero bueno.
¿Cómo podemos asegurarnos de que haya pragmatismo en todos los niveles cuando lancemos una iniciativa de software modernisation?
Esta también fue una gran pregunta, donde discutimos el papel del liderazgo en todos los niveles para crear alineación y hacer que ese producto y la visión técnica para la modernización, sea algo que todos entiendan.
Citaré aunque no textualmente a algunos de los panelistas, "lo que quieres es que, sin importar con quién estés hablando en la organización, te puedan decir qué es lo más importante que queremos conseguir y por lo que estamos trabajando y cómo cada miembro del equipo contribuye a ello". Eso solo puede suceder a través de una comunicación constante y consiguiendo que los líderes (no solo las personas con autoridad) resuenen con esta visión.
Por último, pero no menos importante, era hora de mezclarse y hacer nuevos amigos. Después de una charla muy interesante, no hay nada como compartir ideas y conocer gente interesante.
Tuvimos un total de 57 inscripciones, con una gran variedad de perfiles asistentes. Desde CTOs hasta Desarrolladores y Gerentes de Producto, hubo todo tipo de profesionales de la industria interesados en el tema y dispuestos a compartir sus experiencias y pensamientos con una buena copa de vino y algo de “pica-pica”. Me llevo algunos chats geniales y personas a las que definitivamente me gustaría volver a ver en el futuro.
En general, solo puedo decir que la cálida hospitalidad de Málaga y las conversaciones muy interesantes hicieron de este evento algo para recordar y repetir en el futuro. Como mencioné al principio, Codurance quiere aumentar su presencia en el sur y Málaga es un gran lugar para comenzar. Estad atentos, otros eventos para la comunidad en general y para audiencias más específicas están próximos.
Así que, cuando escuchamos la última llamada de nuestro vuelo, mientras nos preparábamos para subir al avión camino a Málaga, estábamos con mucho sueño después de despertarnos a las 4:30 am, pero felices de que finalmente hubiera llegado el día. Sabía que era solo el principio, y a la vez el final de año y medio de no poder reunirnos en persona para organizar eventos, lo que suponía el comienzo de una nueva era de crecimiento y aventuras, y ¡claro que valió la pena!
